Hoy estaba tumbado en el suelo del salón
mirando al móvil
y llamaron a la puerta.
Abrí.
Eras tú.
Que volvías.
Entonces me desperté dormido en el sofá.
Resulta que solo había sido un sueño,
así que me incorporé
y me tumbé en el suelo
mirando al móvil
por si acaso.